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Olga Rojas Ojeda, Chile-Canadá

 

Biografía de Olga Rojas Ojeda

 

Nací en Arica, Chile y llegué a Edmonton, Alberta, Canadá con mis padres, cuatro hermanas y tres hermanos en 1977.

Fui nombrada Embajadora de la palabra por El Museo de la Palabra, en España.

Fui miembro activo de la comunidad Chileno-Canadiense de Edmonton y la coordinadora de su concurso literario por 3 años consecutivos

Soy poeta y narradora. Empecé a escribir y a leer antes de asistir a la escuela. Así era mi amor por las letras.

. Escribo tanto en inglés como en español y traduzco mis propios trabajos.

He obtenido numerosos lugares y galardones tales como el primer premio con mi historia El último viaje, en el 2000, en Edmonton, Canadá; primer lugar en el 2004 con el poema La muerte de los océanos, en Vancouver, Canadá; Además, mis obras han sido publicadas en Lima, Cajamarca, Perú, Melbourne, Australia; en Miami, Estados Unidos; en Buenos aires, Argentina y en Edmonton, Canadá con la historia titulada The stalker, incluída en la antología Standing together, editada por Linda Goyete y en la revista local Art Trends con mi carta Dear Luisa y otros trabajos literarios. Mi poema Heat and coldness fue publicada en Washington, Estados Unidos en la antología Una isla en la isla por el Latin Heritage Foundation en 1911.

En el mismo año fueron publicados mis poemas el arte de Pablo Neruda, la obra mas perfecta, la legitimidad de P. Neruda, en Isla Negra, Chile.

También en Poetas y Narradores en Miami, en ediciones de el Instituto de Cultura Peruana aparecieron mis poemas Rescate, El diamante de nuestro amor, El velo de luto e Invierno.

En el 2011 en El Salvador, se publicaron mis poemas el Blanco paraíso, y Liviandad y conciencia y mi cuento El niño de los murciélagos.

Los poemas de mi autoría Crear, La tierra de el infortunio, Protección al célebre poeta, El poeta de la justicia, La vara mágica de la intelectualidad, y Enhorabuena fueron publicados en la antología Mil poemas a César Vallejos en el año 2012, por el poeta y editor Alfred Asís.

En 1912 fue publicado mi primer libro bilingue, Crisis on my life, en El Salvador, por el editor Freddy Pacheco.

Por muchos años he estado colaborando con mis trabajos literarios en el periódico edmontoniano, Tribuna Latina, cuyo editor en jefe se llama Arturo Prat.

 

El jardín paradisíaco de versos

¡Cómo acaricia el crepúsculo matutino día a día

a Neftalí Reyes basoalto,

el escritor hecho de fuego, arena y mar!

Y cómo las rosas con sus delicados pétalos se posan sobre sus dotadas manos

y depositan su perfumado rocío en sus elaboradas obras de oro y plata

y sobre sus clásicos coronados de diamantes.

Y el anochecer…

¡Oh, el anochecer! Tórrido lo rodea con sus brazos hasta la saciedad,

hasta beber la última gota de sus composiciones en el paradisíaco jardín de sus versos y por fin haber saciado su infinita sed.

El embravecido mar se calma al percibir sus declamaciones mientras sus olas se acercan para que se siente en su regazo marino

Y les recite poemas de miel y justicia.

Dime, Neftalí Reyes…

¿En qué pasaje secreto de tu edénico jardín

guardas con tanto celo tus inspiraciones?

¿En qué callejón oculto de tu existencia ida guardas las melancolías de tus postreros momentos?

¿En qué rincón se encuentran tus filosofías,

tus ideales, tus amores, tus recuerdos

y tus objetivos?

Quisiera presenciar las miles de virtudes

que tus odas engendran

y ser testigo de el nacimiento de cada fenomenal obra tuya.

Quisiera aliarme con la naturaleza

e ir en pos de ti y de tus más preciados tesoros

y poder extasiada absorber desde

la A hasta la Z tus escritos

y sellarlos con fuerza en mi mente

y que la memoria incapaz sea de diluírlos.

 

 

El albergue de los desamparados

Dedicada a Sor Teresa de Calcuta

 

Deseo que las rupias se te multipliquen

para que fundas muchos albergues

para tus húerfanos

y que nazcan muchas casas de moribundos

donde tus enfermos se entreguen en paz,

a la muerte.

 

Deseo que la desolación de el desamparado tuyo se transforme en amparo total

Que la caridad humana se convierta en genuina compasión por aquellos desasistidos que tú tanto protegiste.

 

Ahora que te has ido, oh madre de los pobres;

¿Quién con esmero atenderá a tus indefensos y enfermos?

 

¿Quién será aquél de inquebrantable devoción

que con amor cristiano sostenga tus hogares infantiles, leproserías, albergues y hospitales?

 

¿Existirá alguien en el mundo que posea un corazón como el tuyo y que le quepe en el pecho una humanidad sufriente para rescatar y amar?  

Vivamos como hermanos

 

Para vivir en armonía entre nosotros los seres humanos y disfrutar a plenitud nuestro entorno natural debemos mantener una relación equilibrada y aprender a respetar nuestro planeta…

¡Vivamos como hermanos!

Para sustentar una sana y fuerte convivencia y amistad donde imperen la calma y la paz, debemos rechazar todos nuestros sentimientos negativos y escuchemos el silencio en medio de el mundanal ruido y deseemos de todo corazón abandonar nuestros egoísmos y ambiciones.

Para prevalecer en un mundo libre de conflictos, adversidades y esclavitudes, desechemos para siempre la violencia y las guerras y seamos testigos de el inmenso amor que se entregan las montañas y el mar.

Que en forma permanente sea nuestra ardiente oración recibir bienestar, seguridad y estabilidad y que estemos dispuestos a dialogar para establecer un justo consenso

 

¡Porque la paz es un derecho

Y un deseo universal!

 

El Padre de los océanos

Yo, el ciclo de la vida, era un organismo vivo.

 

Defenderme podía de mis enemigos

los parásitos,

virus y bacterias que asolaban mi lecho.

 

Tú, me has envenenado con residuos

líquidos y sólidos

y con cargas contaminantes.

Has invadido mi espacio acúatico impunemente,

has dañado a mis hijos los peces,

los moluscos,

los crustáceos, los mariscos y las algas.

 

Yo, El Padre de las aguas,

era el principal elemento estabilizador

de la superficie terrestre;

el mantenedor de el mas perfecto equilibrio

de la vida oceánica y de la existencia humana.

 

Me has convertido en un panorama de desolación porque ahora se han agotado mis defensas, has aniquilado mis propiedades dinámicas, físicas y químicas.

has provocado que las arrecifes costeras

se inunden irremediablemente

y que la humanidad se refugie en las colinas.

 

Mi superficie se ha cubierto de una gigantesca costra formada de orgánicos deshechos.

El hedor ha ascendido hasta el cielo

y descendido hasta el abismo.

 

La gente desfallece de hambre y de sed,

hacinados estan en las Alturas,

expuestos a desconocidas tempestades

y sufriendo extrañas epidemias,

sacudidos de una violenta agonía.

 

Hemos llegado a la hecatombe final.

Yo, el planeta de agua y la raza humana,

Juntos exhalamos nuestro postrer suspiro.

 

 

Invierno alado

 

El soplido del viento de la mañana me ha despertado con la aspereza de sus alas de colores miles, me cuenta al oído las maravillas que ha presenciado durante su largo recorrido por el blanco territorio y de sus encuentros con un ser místico y misterioso y me ha despojado de mis matinales perezas y ha logrado que camine por interminable horas por la huerta de nieve y que arribe hasta donde jamás finaliza el arcoiris y en el fin de mi jornada, me sumerjo en las aguas de la semicongelada catarata, la que feliz me fluye el cuerpo carente de ropa que me abrigue.

Se esmera el rígido césped de entibiar mi anatomía de manjar mientras la aurora boreal me inunda con sus luminiscencias y destellos mágicos que de sí misma desprende para bsequiarme.

Ustedes árboles del bosque, reúnanse y cúbranme con sus ramas, acurrúquenme en sus copas, Imprégnenme de perfume, vístanme de frondosidad.

Abejas, no dejen de sustentarme con la exquisita sustancia que ustedes producen y yo les hablaré sobre la nación que fluye leche y miel, una tierra lejana y cercana a sus corazones, y ustedes osos, salgan de sus guaridas y embellezcan el blanco panorama y les prometo que el vientre de los lagos les proveerá cientos de salmones y ustedes caribúes en manadas, llévenme hasta la montaña mas alta, donde habita el aguila para que él y yo podamos conocernos y crearnos muchos inviernos más, juntos y que me cobije debajo de sus alas y me proteja del frío y escarchas y recorrer incansables los senderos aún vigentes y los que el tiempo corroe y erosiona y que nadie nos arrebate nuestra perfecta dimensión, nuestra blanca tierra ancha.

 

La escalera dorada de la liberación

 

Pablo De Rokha,

supe alguna vez que las letras

nacieron y crecieron en tu misma esencia y que durante tu infancia,

juntos caminaban por la hacienda

Pocoa de Corinto, escribiendo fábulas

de noche y de día.

 

Alma acongojada de dolores sociales,

te aseguro que me gustaría llenar tu copa de divinidad hasta que rebase y apaciguar con vendas de cariño la herida fatal que llevas en tu pecho y resucitar en ti al hombre optimista y fuerte que se esconde tras las apariencias.

Si pudiera, Pablo, yo te redimiría con mis poemas, y con jacintos perfumados y con el rocío de la mañana y con miríada de palabras mullidas que borren ese rictus de amargura en tus labios y que disipe ese temblor en tu voz y se desvanezcan tus incertidumbres y sería aquella que construiría nidos para ti y tus dieciocho hermanos, para ti y tus hijos de la aflicción,para ti y tu entrañable esposa.

Te llevaría por las nevadas cumbres cordilleranas, volarías como el cóndor surcando el cielo y los habitantes de tu nación serían testigo de tu transformación y el guanaco y el puma jugarían contigo hasta el amanecer.

Si yo pudiera, Pablo, posaría en tus manos la unción de la democracia y de la justicia social para que se sacie tu sed, para que vivas en plenitud tus quimeras, para que veas cumplidos tus anhelos y desaparezca tu tristeza de antaño y que tu bienaventuranza empieze desde el nacimiento de la eternidad.

Busca al final del arcoiris una escalera dorada y luminosa, síguela hasta el último peldaño, percibirás cuan cerca está de ti tu liberación, allí encontrás luz abundante e infinita.

 

La hoz será tu cruz de salvación

y el martillo tu Cristo redentor.  

 

Proyección energética (Poema dedicado a la Música)

 

La música,

cuyos acordes poseen la habilidad de transportarme en el tiempo.

 

Vuelvo a vivir pasadas experiencias

hasta huelo delicias de el pasado

y capto vibraciones que ya fueron.

 

Su melodía, ritmo y tonalidad

arrebujan mi ser y mi cuerpo se aliviana de pesares borrando la desesperanza y el desaliento

 

Existe desde tiempos inmemoriales

bañando con sus sonidos la atmósfera terrestre y a nosotros simple mortales,

y a todo ser viviente.

 

Su intensidad sonora libera

los sentimientos negativos

Es historia permanente,

a las leyes de el tiempo se ha negado atarse.

 

Yo me he regido a los parámetros de el sonido

y he vibrado juntamente

con su cuerpo invisible,

armónico, rítmico… su lenguage universal

Es estimular nuestros sentidos,

superar nuestros traumas,

soportar nuestras pruebas,

aprender a ser felices.

 

¡Cierro mis ojos disponiéndome a disfrutar

de aquella proyección energética que

aquellas melodiosas notas musicales imparte!